Transferencia de embriones: ¿es mejor realizarla en día 3 o en día 5?

La transferencia de embriones es uno de los momentos más importantes del proceso de fecundación in vitro. Una vez hemos realizado la extracción de los ovocitos con la punción folicular y estos se han fecundado en el laboratorio con el espermatozoide, los embriones van a comenzar a desarrollarse. El siguiente paso es transferir uno o dos de esos embriones al útero materno. La pregunta clave es: ¿cuándo debemos hacerlo?

El doctor Enrique García, ginecólogo de miniFIV, nos habla del momento idóneo para realizar la transferencia y del significado de los estadíos de desarrollo embrionario.

Estadíos del desarrollo de los embriones

En general, la transferencia suele hacerse cuando los embriones tienen tres o cinco días vida. Es cierto que en algunas ocasiones podemos programarla en otros momentos menos frecuentes (como el día dos, cuatro o incluso sexto), pero estas serán excepciones con causa justificada. Veamos ahora qué significan los estadios de día 3 o día 5:

• En día 3 el embrión se encuentra en un estadío de células.
• En día 5 el embrión se encuentra en un estadío de blastocisto.

Por tanto, una de las dudas más frecuentes que se nos plantean es la decisión de transferir el embrión con tres días de desarrollo o bien prolongar dos días más su estancia en el laboratorio y por lo tanto su evolución. ¿de qué va a depender esto?

Transferencia de embriones, ¿en qué día?

Tenemos que tener en cuenta que, afortunadamente, la ciencia continúa avanzando. Los progresos en el campo de la reproducción asistida hacen que los laboratorios de FIV hayan mejorado muchísimo en los últimos años.

Antes solíamos escuchar la frase “el mejor incubador es el interior del útero”. Existía el miedo de que al esperar esos dos días acabásemos perdiendo algunos embriones porque las condiciones en los laboratorios no fuesen las más adecuadas. Por eso la tendencia era hacer la transferencia de embriones lo antes posible.

Hoy en día podemos estar muy seguros de que el embrión que en el laboratorio no continúa con su desarrollo normal, tampoco iba a hacerlo dentro del útero materno. Lo mismo ocurre en el caso contrario: el embrión que en el laboratorio crece de forma correcta también lo iba a hacer de haberlo transferido antes.

Por eso la tendencia actual apuesta cada vez más por hacer transferencias en día 5. Esto nos permite observar más tiempo los embriones en el laboratorio, recopilar más información y ser capaces de evaluar con mayor precisión cuál es el potencial de cada embrión para conseguir un embarazo.

La importancia de un tratamiento personalizado

Sin embargo, no hay que olvidar que, como siempre en Medicina, es indispensable realizar un tratamiento lo más personalizado posible y profundamente adaptado a las características individuales de cada paciente.

Por eso, a pesar de lo que acabamos de decir, tenemos que valorar muchos parámetros antes de decidir en qué momento hacer la transferencia. Algunos de estos factores son:

• Calidad de los embriones
• Calidad de los ovocitos y del esperma
• Edad de los pacientes
• Número de embriones disponibles
• Tipo de tratamiento (si se trata de una donación de ovocitos, si vamos a hacer análisis genético de los embriones)
• Patologías asociadas
• Estado del endometrio
• Si la transferencia es en fresco o en diferido
• Preferencias de los pacientes

Protocolos a medida en miniFIV

En resumen, cada caso es diferente y las decisiones relativas a los tratamientos tienen que tomarse de forma completamente individualizada. Además, siempre serán de modo conjunto entre el equipo de la clínica (incluyendo tanto a embriólogos del laboratorio como a los ginecólogos) y los pacientes.

Si deseas que nuestro equipo estudie tu caso y te proponga opciones para ser madre, contacta con nosotros en el 900 053 653 o rellenando nuestro formulario electrónico para que te llamemos. Recuerda que en miniFIV somos especialistas en protocolos de estimulación suave.