Nutrición fértil en tu menú semanal: consejos para el día a día

La nutrición fértil también es posible en un menú semanal. En nuestros blogs de Nutrición Fértil queremos siempre aconsejaros recetas y pautas que encajen en vuestra rutina. Porque de nada sirve seguir una dieta que te obligue a preparar platos complejos o con ingredientes que sean difíciles de encontrar (o carísimos).

Hoy os traemos unos consejos muy sencillos para que la nutrición fértil se adapte al menú semanal, es decir, al día a día. ¿Cómo sería un día fértil? Os lo contamos en este blog, con la ayuda de Virginia Ruipérez, nuestra experta en nutrición y fertilidad.

Nutrición fértil por las mañanas

Lo primero que debes hacer al levantarte es beber un vaso de agua. A continuación, tienes varias opciones, tanto si eres de desayunos dulces como salados.

Bebe un tazón de bebida de soja, almendras, avena o arroz. Es aconsejable también tomar un yogur al día, natural y procedente de agricultura ecológica. Puede ser de leche de vaca o elaborado con soja. Puedes mezclarlo con frutos secos, sin tostar y sin salar, o bien higos, albaricoques secos, ciruela negra, semillas de lino.

Desayuna también un cereal integral en la forma que más te guste: copos de avena, muesli, tostadas de pan integral, galletas integrales. Si te gusta el dulce, elige mermelada biológica, preferiblemente de arándanos o albaricoques.

Para acompañar la comida con una bebida caliente, no abuses del café. Si prefieres las infusiones, opta por romero, tomillo, melisa, diente de león, jengibre o té verde. Endulza siempre con miel artesanal o azúcar moreno de caña.

¿Te gusta comer fruta por la mañana? Tómala sola, sin acompañar con otros alimentos, y espera siempre media hora hasta comer otras cosas. Por supuesto, elige fruta natural y de temporada.

Menú semanal de nutrición fértil: ¿cómo es el plato principal?

Con el estilo de vida que seguimos mayoritariamente, el desayuno ha dejado de ser la comida más importante del día. De hecho, el plato más proteico y nutritivo debe ser el del mediodía. Aquí tienes los elementos fundamentales que debe incluir esta comida.

Ensalada

¿Sabías que un tercio de la comida diaria debe tomarse cruda? Por eso debes empezar la comida (y si es posible, la cena), con una ensalada. Ya os hemos dado sugerencias de ensaladas en otros blogs, hoy traemos pautas básicas de nutrición fértil para que preparéis el menú semanal. Incluid ingredientes de cada uno de estos grupos:

• Hojas: lechuga, roble, cogollos, rúcula.
• Alcaloides amargos: endivia, escarola, rabanitos.
• Carotenoides, alimentos anaranjados o rojos: zanahoria, remolacha, tomate, pimiento.
• Verduras crudas, que pueden ser lombarda, brécol, repollo, judías verdes, puerro, hinojo.
• Germinados: brotes de alfalfa, de brócoli, lenteja, soja, trigo sarraceno, arroz.
• Familia de los allium: cebolla, cebolletas, ajo, puerro y apio.

Podéis cortar los ingredientes en juliana (en tiras finas) y no olvidéis que siempre hay que utilizar aceite de oliva virgen para el aliño.

Plato “de cuchara”

Después de la ensalada, la comida principal del día se completa con el tradicional “plato de cuchara”. Esta opción es deliciosa, nutritiva y se puede preparar de muchas maneras. Eso sí, la base siempre será uno de estos dos ingredientes:

• Cereal integral, de cultivo biológico. Podéis elegir entre arroz, quinoa, trigo sarraceno o pasta. Más allá de los espaguetis tenéis canelones, mijo…
• Legumbres: judías, guisantes, lentejas, garbanzos.

Tanto cereales integrales como legumbres deben incluirse en la dieta 3 o 4 veces por semana.

Las cenas en un menú semanal de nutrición fértil

Tu cena fértil siempre será ligera y de fácil digestión. De nuevo puedes optar por una ensalada, unas verduras cocidas al vapor, un plato sencillo de cereales, fruta. Si eliges proteínas animales para esta hora, decántate por el pescado de mar (lubina, dorada, merluza, atún, caballa).

Además de los ingredientes de tus comidas, debes cuidar otros aspectos para respetar y optimizar el proceso digestivo. Por ejemplo, elige un lugar tranquilo y agradable, en el que disfrutar del momento. Come despacio, mastica bien y, por supuesto, olvídate de las pantallas.

Otra pauta importante es el “concepto aperitivo”. Esto implica que las comidas siempre tienen que comenzar con un alimento de origen vegetal y crudo. Estos favorecen la segregación de jugos digestivos, estomacales, intestinales y biliares, que a su vez facilitan la digestión y la asimilación de los nutrientes. Puedes empezar por la ensalada o, al menos, tomar unas cucharadas.

Te acompañamos en miniFIV

En nuestra clínica miniFIV nos gusta acompañar a las pacientes en su camino para crear una familia. Por eso ofrecemos también asesoramiento nutricional y psicológico, porque entendemos que un tratamiento de fertilidad es un proceso global. Si quieres, podemos explicarte todo y analizar tu caso en una primera consulta gratuita. Solo tienes que llamarnos o dejarnos tus datos y el equipo contactará contigo para darte una cita.