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Fertilidad 10 agosto 2023 | By Minifiv
Comité Editorial Blog miniFIV

Embarazo ectópico: síntomas, causas y tratamiento

El embarazo ectópico es una anomalía muy frecuente en la gestación. Ocurre cuando el embrión no llega a implantarse en el útero y se desarrolla fuera de este.

Este tipo de patologías comportan graves riesgos tanto para el embrión como para la madre, por eso hablamos de gestaciones no evolutivas. Nos lo explica con más detalle en este artículo la doctora Nereida Galajares, ginecóloga de MiniFIV.

¿Qué es un embarazo ectópico?

El embarazo ectópico es cualquier implantación embrionaria fuera de los límites de la cavidad endometrial. Esta gestación anómala ocurre en un 2% de los casos, aproximadamente.

Después de la fecundación, el embrión se desplaza a través de las trompas de falopio hasta llegar a la cavidad uterina, donde se implanta. Pero en un embarazo ectópico esto se produce en cualquier punto del camino, siendo la localización más frecuente en las trompas uterinas. Ocurre así en un 90 o 95% de los casos. No obstante, existen otras posibilidades como el ovario, el cuello del útero, el cuerno uterino o, incluso, la cavidad abdominal.

La principal complicación que puede surgir durante un embarazo ectópico es la rotura del mismo. Habitualmente, se produce de forma súbita y si no se corrige rápidamente puede tener consecuencias graves. Por ello es muy importante su diagnóstico precoz. Este permite extremar la vigilancia y optar por el tratamiento más aconsejable y seguro en cada caso.

Otra de las consecuencias a largo plazo de la gestación ectópica es su riesgo de recurrencia. Este puede alcanzar el 20-40% y limitar las opciones reproductivas de la paciente.

embarazo ectópico

Síntomas del embarazo ectópico

Existen síntomas que pueden aparecer durante una gestación ectópica y que pueden guiarnos en la sospecha diagnóstica. Se trata, principalmente, de dolor abdominal intenso acompañado o no por sangrado vaginal. Esto, si la mujer no sabe que está embarazada, puede interpretarse como efectos del ciclo menstrual.

Si el embrión empieza a desarrollarse fuera del útero, los dolores pélvicos o abdominales serán muy fuertes. Podrían estar también acompañados de hemorragias, malestar o náuseas. Los síntomas pueden variar y suelen producirse entre la semana 4 y la 12 del embarazo.

En casos excepcionales, el embrión puede desarrollarse hasta llegar a romper la trompa, lo que de nuevo produce un dolor agudo. Esto requiere una intervención médica inmediata. Estos son los síntomas de la rotura de una trompa:

  • Dolor de estómago repentino y muy intenso
  • Sensación de malestar muy fuerte
  • Mareo repentino
  • Desmayo
  • Palidez

Causas del embarazo ectópico

Una de las causas principales del embarazo ectópico es la obstrucción de una trompa de Falopio. Esto impide que el embrión llegue al útero para implantarse. A su vez, esta alteración en la trompa puede deberse a una inflamación pélvica inflamatoria originada por salpinguitis o clamidia.

En cualquier caso, no hay una causa definitiva identificada que provoque los embarazos ectópicos. Lo que sí existen son factores de riesgo, como comentaremos a continuación.

Factores de riesgo del embarazo ectópico

Existen distintos factores que aumentan el riesgo de sufrir una gestación ectópica:

  • Antecedente de una enfermedad inflamatoria pélvica (infección vaginal que asciende por el útero a las trompas obstruyéndolas como secuela a largo plazo)
  • Cirugía pélvica previa
  • Endometriosis
  • Miomas uterinos
  • Edad materna avanzada, más allá de los 40 años
  • Antecedente de embarazo ectópico previo
  • Llevar un DIU
  • Consumo de tabaco

Parece que tras tratamientos de reproducción asistida como la FIV también aumenta la frecuencia de embarazo ectópico.

¿Cómo se detecta un embarazo ectópico?

La sospecha diagnóstica de esta entidad se realiza cuando, al realizar una ecografía tras un test de embarazo positivo, no encontramos un saco gestacional dentro del útero. Posteriormente, se inician controles analíticos seriados cada 48-72h de los niveles de hormona de embarazo (B-HCG). El patrón de ascenso de esta hormona está alterado cuando la gestación se encuentra ubicada fuera de la cavidad uterina.

Finalmente, conforme avanza la gestación ectópica, suele verse claramente en la ecografía una imagen de embarazo ubicada fuera del endometrio, confirmándose por tanto el diagnóstico.

Tratamiento del embarazo ectópico

Las gestaciones ectópicas, dado que se encuentran ubicadas en un lugar de la anatomía en el que no se puede desarrollar correctamente la placenta son, por definición, no evolutivas. Por tanto, tenemos que realizar un tratamiento para detener su desarrollo de la forma menos invasiva posible. En muchos casos, incluso, el embarazo ectópico se detiene espontáneamente y se resuelve sin que hagamos ningún tratamiento. Es por ello que, en los casos más leves, podemos optar por seguir una conducta expectante. Es decir, esperando a que la regresión espontánea del cuadro clínico se produzca mientras hacemos una estrecha vigilancia con ecografías y analíticas.

En otros casos, en cambio, tendremos que decidir entre dos tratamientos.

Tratamiento médico

El tratamiento médico consiste en la administración de una medicación inyectada llamada Metotrexato. Si no se consigue resolver la situación, se puede repetir su administración. El principal inconveniente es que, por su toxicidad, habrá que esperar 6 meses desde el tratamiento hasta iniciar la búsqueda de gestación de nuevo.

Tratamiento quirúrgico

La otra opción de tratamiento existente es la cirugía. Esta se efectúa por vía laparoscópica preferentemente y, habitualmente, obliga a la extirpación total de la trompa en la que se ubica el embarazo ectópico para lograr eliminarlo por completo (salpinguectomía). En cambio, en algunos casos señalados, podremos evacuar el embarazo ectópico de la trompa sin extirparla. Sin embargo, existen dudas de que la trompa mantenga intacta su anatomía y su función después de la intervención (salpingostomía).

Evaluamos tu fertilidad en miniFIV

En conclusión, el embarazo ectópico es una patología frecuente. Debemos diagnosticarla de forma precoz para evitar complicaciones y poder priorizar el tratamiento más conservador con la fertilidad posible en cada caso.

En MiniFIV te ayudamos a cumplir tu ilusión de tener un hijo. Valoramos tu fertilidad y apostamos por tratamientos respetuosos para tu cuerpo. También podemos realizar un seguimiento de la evolución del embrión, una vez implantado. Si tienes cualquier duda sobre tu proyecto de familia, consúltanos. Puedes llamarnos por teléfono o dejarnos tus datos en el formulario de la web para que el equipo te contacte directamente.