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Alternativas a los lácteos: ¿favorecen la fertilidad?
Hablar hoy de alternativas a los lácteos es algo totalmente asumido por los consumidores. La oferta es muy variada y se pueden conseguir en cualquier punto de venta. Son muchas personas las que deciden prescindir de leches de origen animal y de sus derivados, por distintos motivos.
Hoy queremos hablaros de las alternativas a los lácteos que existen y si son recomendables para una dieta que potencie la fertilidad. Lo hacemos, como siempre, con la ayuda de Virginia Ruipérez, la directora del departamento de Nutrición de miniFIV y creadora del método Fertilidad Natural.
Bebidas de origen vegetal: la alternativa saludable
Podemos seguir una alimentación vegetariana prescindiendo de la leche animal sin tener carencias de nutrientes. Aunque esto no siempre ha estado tan asumido, tenemos que romper con el apego psicológico al “amamantamiento diario”. Existen bebidas de origen vegetal, por ejemplo, hechas a base de cereales o semillas, que son muy nutritivas y digestivas. Cumplen la misma función que la leche, pero sin efectos nocivos como las alergias, el estreñimiento o la diarrea, o la intolerancia a la lactosa. Y lo que es más importante: estas bebidas respetan los procesos fisiológicos del cuerpo y facilitan su ritmo natural.
Hablamos de “horchatas”: vegetales triturados y macerados en agua, endulzados o con especias. Son bebidas con muchos nutrientes, ricas en proteínas de alta calidad, minerales, vitaminas, hidratos y que solo contienen ácidos grasos insaturados.
Son muy digestivas, no producen fermentaciones intestinales. Están recomendadas para todos, pero especialmente para personas con su procesos digestivos débiles, ya sean ancianos o personas con intolerancias o alergias.
Si bien es cierto que aportan menos cantidad de calcio y menos proteínas que la leche de vaca (excepto la bebida de soja), estas alternativas a los lácteos son mucho más saludables.
Fuentes de calcio alternativas a la leche
Puesto que la cantidad de calcio de estas bebidas de origen vegetal es menor, conviene reforzar este nutriente con otros elementos de la dieta. Además, el calcio de la leche de vaca no es biodisponible, ni está en proporción equilibrada con resto de nutrientes.
Las legumbres son excelentes fuentes de calcio: judías, garbanzos, lentejas, soja y sus derivados. También se encuentra en verduras como la col, coliflor, brécol y lombarda. Precisamente el organismo absorbe más calcio de verduras cocidas, como brécol, espinacas o espárragos trigueros, que en la leche de vaca.
Otras fuentes de calcio son los germinados de semillas como la alfalfa. Los frutos secos (las almendras o las pipas de girasol), las algas y la levadura de cerveza también son ricos en calcio. Una cucharada de sésamo crudo aporta la misma cantidad de calcio que un vaso de leche, pero con mucha mayor calidad en conjunto del alimento.
Dieta fértil: prescinde de la soja
Más allá de una dieta saludable, si lo que quieres es una dieta que potencie tu fertilidad, debes prescindir de la soja. Esta está muy presente en bebidas alternativas a los lácteos y también en su derivado, el tofu. La soja contiene sustancias con efecto estrogénico que afectan a los niveles hormomales y por tanto, a la fertilidad. También puede favorecer el desequilibrio del tiroides, que es una glándula esencial para mantener la fertilidad de hombres y mujeres.
Sí se pueden consumir ocasionalmente productos derivados de la soja que estén fermentados, como la salsa de soja o el miso. El proceso de fermentación reduce los efectos negativos sobre la fertilidad. Por ejemplo, una vez por semana podéis consumir un wok de arroz y verduras con salsa de soja.
Yogur de vaca y kéfir, excepciones saludables
Por otra parte, de entre las muchas opciones para sustituir los lácteos animales sin perder nutrientes, hay dos excepciones que podéis incluir en una dieta saludable y fértil. Se trata del yogur y el kéfir. Son alimentos lácteos fermentados, la única forma en que nuestro cuerpo puede digerir y asimilar la leche, gracias a la acción de sus bacterias lácticas vivas. Por eso son son fuente de salud, nutren y aportan muchísimos beneficios. Eso sí, ambos deben ser siempre naturales, sin edulcorantes, azúcares ni sabores, y con leche entera, no desnatados ni con cero grasas.
Ya sabéis que el kéfir, al igual que el yogur, es una leche fermentada pero a temperaturas inferiores. Por eso contiene más microorganismos vivos, decenas de bacterias beneficiosas para el organismo.
¿Necesitas asesoría para una dieta fértil? Te ayudamos
En nuestro próximo blog os ofreceremos algunas recetas sencillas para que preparéis en casa vuestras propias bebidas alternativas a los lácteos. Ya sabéis que también podéis hacer yogures caseros, que mezclados con frutos secos os darán un delicioso y fértil tentempié.
En miniFIV somos especialistas en tratamientos de fertilidad lo más respetuosos posible para el cuerpo. Por eso contamos con un departamento de nutrición el que te os asesoramos para potenciar la fertilidad y el éxito de los tratamientos a través de vuestra alimentación. Consultadnos cualquier duda, nuestro objetivo es ayudaros a tener un hijo.